El temperamento:

Publicado en por niñezsocioafectiva

Partiendo  del concepto de que cada individuo nace con un patrón específico de respuesta conductual. Los rasgos temperamentales se pueden ver estimulados o inhibidos por factores externos como las interacciones, tanto familiares como culturales, ambientales y sociales.

Los estudios de seguimiento muestran que el temperamento permanece casi igual hasta que los niños cumplen 5 años y medio y que, posteriormente, el ambiente comienza a influir y a modelar dichos rasgos con mayor fuerza.

En 1968, Alexander Thomas, Stella Chess y Birch, revolucionaron los enfoques sobre el temperamento del niño y resaltaron su capacidad de influir en su medio. Contrastaron esta perspectiva con modelos que tradicionalmente consideraban al niño como receptor pasivo de influencias externas, o de modelos causales de tipo unilineal y unidireccional. Los autores recién mencionados son pioneros en la investigación del temperamento, principalmente en niños. Lo definieron como el componente estilístico de la conducta (cómo), diferenciado de la motivación (porqué) y del contenido de la conducta (qué). El temperamento está constituido por aquellos atributos psicológicos que no son secundarios o derivados de otras características como podrían ser la cognición, el despertar, la motivación y la emotividad, y siempre hay que diferenciarlo de las motivaciones, de las capacidades y de la personalidad. La energía, la persistencia y la intensidad son elementos del temperamento.

Estos autores a lo largo de su investigación, establecieron nueve categorías conductuales presentes desde el nacimiento:


-Nivel de actividad,

-Regularidad o ritmicidad de la funciones,

-Aproximación o retirada a nuevos estímulos,

-Adaptabilidad a situaciones nuevas,

-Umbral de respuesta a los estímulos,

-Intensidad de la reacción,

-Cualidad del humor,

-Distractibilidad frente a los estímulos indeseables,

-Persistencia y capacidad de atención.

 

Asimismo, señalaron la existencia de tres tipos temperamentales mixtos resultantes de la combinación de las categorías antes mencionadas:

 

 A. Temperamento fácil:

Es la combinación de la regularidad biológica, de las tendencias de acercamiento a lo nuevo, de la adaptabilidad rápida al cambio, y de un afecto predominantemente positivo de intensidad leve o moderada. Este grupo constituye 40% de la población estudiada.

 

B. Temperamento difícil:

Es lo opuesto del temperamento fácil, principalmente en cuanto a la irregularidad biológica. Hay tendencias de aislamiento hacia lo nuevo, lenta adaptación al cambio y frecuentes e intensas expresiones negativas. Se presenta en 10% de la población estudiada.

 

C. Temperamento de adaptación lenta (slow to warm up):

Incluye tendencias de aislamiento hacia lo nuevo, lenta adaptación al cambio y frecuentes respuestas negativas de leve intensidad. Estas personas a menudo son consideradas como tímidas. Comprenden 15% de la población (S Chess, A.Thomas, 1991).


Dado que el temperamento del niño es único, también ayuda a respetarlo como individuo, reconociendo su individualidad, en vez de tratar de cambiar su naturaleza básica. Eso no significa aceptar todo tipo de comportamiento, sino ajustar las técnicas de crianza para lidiar lo mejor posible con los aspectos más difíciles de su personalidad. Al respetar la individualidad del niño y mostrar que se le entiende, su vida comenzará más feliz y con un sentimiento positivo de amor propio.

¿Según Alexander Thomas, Stella Chess y Birch como se define el temperamento?

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